La guía definitiva si vas a comprar una moto eléctrica
Las motocicletas eléctricas han ganado una gran popularidad en los últimos años gracias a su eficiencia energética y su contribución a la reducción de la contaminación ambiental. Si estás considerando comprar una moto eléctrica, es importante tener en cuenta varios aspectos clave.
Elige la moto adecuada para tus necesidades
Antes de decidirte por un modelo en particular, es crucial identificar el propósito principal de la moto. ¿La utilizarás para desplazarte diariamente en la ciudad, realizar viajes largos por carretera o una combinación de diferentes usos? Comprender tus necesidades y el tipo de conducción que realizarás te ayudará a seleccionar el tipo de moto más adecuado para ti.
Por otra parte, el nivel de experiencia con motos también es un factor importante. Si eres principiante, es recomendable optar por modelos más ligeros y manejables que te brinden mayor facilidad de control. A medida que adquieras más experiencia y confianza en la conducción, podrás considerar motos con mayor potencia y características avanzadas. Además, el tamaño y peso de la moto también deben ser tenidos en cuenta.
Piensa en tus preferencias personales y en tu comodidad al conducir. Si prefieres una moto más ligera y ágil para maniobrar en el tráfico urbano, las opciones de tamaño medio o pequeño podrían ser las más adecuadas. Sin embargo, si tienes en mente viajes largos o necesitas transportar carga adicional, podría ser conveniente optar por una moto de mayor tamaño y capacidad. Al tener en cuenta estos aspectos podrás seleccionar la moto que se ajuste a tus necesidades y te ofrezca una mejor experiencia.
Precio
¿Hay una diferencia significativa entre el coste de una moto eléctrica y una convencional? Actualmente, debemos tener en cuenta varios factores como el coste de la gasolina y la luz. Si comparamos el coste de ambos, no hay duda de la ventaja económica que supone para nuestro bolsillo adquirir una moto eléctrica. Además de ello, en la actualidad, las administraciones públicas ofrecen numerosas ayudas y subvenciones que permiten adquirir motos eléctricas a un precio reducido, y también se pueden obtener ventajas fiscales como por ejemplo las ofrecidas por el Plan MOVES III. Junto con estos beneficios, los costos operativos y de mantenimiento de estos vehículos son inferiores a los de las motos convencionales, como explicaremos más adelante.
A la hora de adquirir una moto eléctrica no debes centrarte tanto en el precio, sino en el ahorro de dinero que notarás al poco tiempo de haber invertido en una moto. Asimismo, si utilizamos con frecuencia puntos de recarga gratuitos, el coste por kilómetro se reduce aún más.
Rendimiento y autonomía
Un punto clave a la hora de decidirse por un modelo de moto eléctrica u otro es el rendimiento y la autonomía que el vehículo puede ofrecernos. En los últimos años se ha incrementado notablemente las velocidades máximas y la aceleración de este tipo de medios de transporte, y ya no es complicado encontrar modelos que superen los 100 km de autonomía a un buen precio.
La capacidad de la batería y su autonomía en condiciones reales es un aspecto crucial que debe ser examinado y comparado. Afortunadamente, en la actualidad, las baterías han experimentado mejoras significativas en términos de vida útil, capacidad de carga rápida y mayor kilometraje. En este sentido, la batería Silence destaca por ofrecer numerosas ventajas en comparación con otras opciones disponibles.
Una de las principales ventajas de la batería Silence es su servicio de suscripción, que te permite pagar solo por el uso. Esto se traduce en un ahorro de hasta un 40% al adquirir cualquier vehículo Silence. Además de ser económicamente beneficioso, este servicio te libera de preocupaciones relacionadas con el mantenimiento y la obsolescencia tecnológica de la batería.
Optar por un modelo que cuente con un sistema de frenada regenerativa también es otro punto fundamental, ya que ayuda a minimizar el gasto de batería durante su uso al usar las frenadas para generar energía.
Infraestructuras de carga
Pese a que existe la creencia general de que no existen suficientes puntos de carga, en los últimos años , han ido extendiéndose por todo el país gracias al apoyo de las administraciones públicas, que junto con el sector privado, están trabajando por fomentar el uso de vehículos eléctricos. El objetivo principal es facilitar que los usuarios puedan beneficiarse de las ventajas que ofrecen este tipo de medios de transporte e iniciar la transición hacia un modelo de transporte más sostenible. Algunos de estos puntos ofrecen carga rápida, disminuyendo el tiempo de espera, y aunque generalmente son compartidos con vehículos de cuatro ruedas, hay numerosos puntos de carga específicos para motos eléctricas.
En la actualidad existen más de 1.500 puntos de carga para motos eléctricas, siendo Barcelona la ciudad con mayor número de infraestructuras de este tipo, 252 de las cuales 114 son específicamente para motos. Por otra parte, en Madrid, existen alrededor de 124 de las cuales 25 se encuentran en la vía pública. A todos ellos se puede acceder con la acreditación de vehículo eléctrico, una tarjeta gratuita que ofrece la posibilidad de cargar cualquier vehículo eléctrico sin coste adicional y la opción de poder aparcar, también de forma gratuita, tanto en áreas verdes como en azules. En el caso de Madrid, se puede acceder usando la tarjeta Movele que dispensa el ayuntamiento de la ciudad.
En los siguientes años se espera la creación de un marco legislativo que reforzará la instalación de este tipo de infraestructuras por todo el país, alcanzando la cifra de un punto de carga por cada 30 plazas de aparcamiento en cualquier garaje y aparcamiento público.
Además del acceso a puntos de carga públicos, también existe la posibilidad de instalar un punto de recargar en casa, una opción ideal para aquellas personas que busquen emplear a diario la moto eléctrica o que vivan en viviendas unifamiliares. Pese a que en la actualidad instalar un punto de carga en un garaje comunitario requiere de una inversión alta, se espera que en los próximos años se abarate debido la obligación de tener una infraestructura de recarga por cada 30 plazas en garajes comunitarios, aparcamientos de edificios de oficinas, en centros comerciales o en edificios públicos.
Posibilidades de movilidad
En los últimos años, muchas ciudades y áreas metropolitanas han implementado restricciones de tráfico para los vehículos sin etiqueta medioambiental con el objetivo de reducir la contaminación y las emisiones en los núcleos urbanos. Madrid, Barcelona y Pontevedra son solo algunos ejemplos de lugares donde estas restricciones ya están en vigor, mientras que ciudades como Cuenca, Toledo y Palma de Mallorca las implementarán en los próximos meses.
A medida que estas restricciones se expandan, los vehículos eléctricos se convertirán en la única opción de transporte privado en las zonas urbanas, ya que su uso no está sujeto a limitaciones.
Incentivos fiscales
Las administraciones públicas llevan años apoyando la transición ecológica a través de ayudas como el Plan Moves III que busca fomentar la adquisición de vehículos más sostenibles, algo que permiten la compra de vehículos eléctricos a un precio inferior. Además de ello, por la compra de una moto eléctrica no tendrás que abonar el impuesto de matriculación y podrás disfrutar de reducciones en la tasa de circulación.
Mantenimiento y costes operativos
El mantenimiento y los costes asociados al uso de un vehículo son sin duda unas de las principales causas que desincentivan la compra de cualquier tipo de vehículo. En este sentido, la adquisición de una moto eléctrica ofrece numerosas ventajas.
- Seguros más baratos: debido a que la aceleración de las motos eléctricas es menor que la de los motores convencionales, su seguridad es mayor. Por ello, muchas aseguradoras aplican rebajas teniendo en cuenta que el riesgo del conductor y del vehículo es menor..
- Menor mantenimiento: Las motos eléctricas tienen menos piezas móviles y no requieren cambios de aceite, filtros de aire ni ajustes de motor regulares, reduciendo la necesidad de mantenimiento.
- Costes de combustible más bajos: la carga de electricidad para una moto eléctrica es considerablemente más económica en comparación con el combustible utilizado por las motos de gasolina.
- Incentivos y subvenciones: como se ha comentado, las administraciones públicas ofrecen incentivos y subvenciones para fomentar el uso de vehículos eléctricos. Estos incentivos pueden incluir exenciones fiscales, descuentos en la compra o instalación de puntos de carga, lo que reduce los costes asociados al uso de una moto eléctrica.
Pruébala
Antes de tomar la decisión, prueba la moto eléctrica durante 1 hora en ciudad. Esto te permitirá familiarizarte con las características y peculiaridades, como su aceleración instantánea, la ausencia de ruido del motor y la sensación de conducción que ofrece.
Al probarla, asegúrate de prestar atención a aspectos como la comodidad del asiento, la posición de conducción o la calidad de los frenos. Otro factor importante a considerar es la autonomía de la batería. Durante la prueba, comprueba cuánto tiempo puedes conducir antes de que la batería se agote por completo. Esto te dará una idea de la autonomía real y te ayudará a determinar si se adapta a tus necesidades diarias. Además, aprovecha la oportunidad para conocer cómo es el proceso de carga y el tiempo de recarga de la moto. Verifica la facilidad de uso de los controles y la interfaz para asegurarte de que te resulten intuitivos y cómodos de manejar.
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